El Gran Premio de Azerbaiyán se llevó a cabo el domingo en el vibrante circuito urbano de Bakú, ofreciendo una emocionante carrera llena de sorpresas y giros inesperados. Oscar Piastri, de 23 años y piloto de McLaren, se llevó la victoria, logrando su segundo triunfo en la Fórmula 1. A pesar de su brillante actuación, la carrera no fue corta de drama, especialmente para Carlos Sainz, quien se quedó sin opciones de podio tras un desafortunado accidente en la penúltima vuelta.
Un Final Impredecible
Piastri no solo se destacó por su talento al volante, sino que también gestionó con maestría la presión de los competidores cercanos. Charles Leclerc, de Ferrari, finalizó en un meritorio segundo lugar, mientras que George Russell, de Mercedes, aprovechó el caos generado en las últimas vueltas para completar el podio en el tercer puesto.
La carrera tomó un giro dramático cuando Sainz, quien había hecho una maniobra brillante al adelantar a Checo Pérez, se vio involucrado en un choque que lo dejó fuera de la contienda. A falta de dos vueltas para el final, ambos pilotos colisionaron, lo que provocó que sus coches se estrellaran contra el muro. Los organizadores de la carrera investigaron el incidente y determinaron que se trató de un «incidente de carrera», sin penalizaciones para los involucrados.
Reflexiones de Sainz y el Impacto en el Campeonato
Tras el choque, Sainz expresó su frustración, aunque se mostró aliviado de que tanto él como Pérez se encontraran bien. «Ha sido una pena tremenda; pero lo más esencial es que tanto Checo como yo estamos bien», dijo Sainz. Además, lamentó la pérdida de puntos valiosos: «Fui mucho más rápido en las últimas veinte vueltas. Pero así son las carreras. Hay que pasar página y seguir adelante».
La victoria de Piastri y el cuarto puesto de Lando Norris, compañero de equipo de Sainz, ha permitido que McLaren arrebate el primer puesto del Mundial de Constructores a Red Bull, acumulando 476 puntos, un margen de veinte puntos sobre los austriacos. Max Verstappen, actual campeón del mundo, finalizó en un sólido quinto lugar, manteniéndose en la cima de la clasificación individual con 59 puntos.
El GP de Azerbaiyán no solo dejó un espectáculo emocionante, sino que también generó una intensa competencia por el título de pilotos y constructores, lo que promete un apasionante desarrollo en la temporada de Fórmula 1.